Meditação Vipassana – prisão Tihar, Índia
Por Shri Tarsem Kumar
Este informe ofrece detalles de los cursos realizados hasta la fecha en la Cárcel de Tihar, y de los resultados de un estudio realizado después del primer curso para verificar sus efectos en los prisioneros y en el personal. El primer curso se celebró del 22 de noviembre de 1993 al 3 de diciembre de 1993 y fue conducido por Shri Ram Singh de Jaipur. Él fue asistido por el profesor P.L. Dhar del Instituto Indio de Tecnología, Nueva Delhi, y por Shri B.L. Chaddha de Faridabad. Posteriormente, se llevaron a cabo cuatro cursos más simultáneamente en diferentes cárceles del complejo carcelario de Tihar, del 1 de enero de 1994 al 12 de enero de 1994. Luego, un curso para más de 1,000 estudiantes fue conducido por el Sr. S.N. Goenka y sus asistentes, del 4 al 15 de abril.
Participantes
Al primer curso asistieron ciento diecinueve participantes. Estos incluían noventa y seis convictos, condenados por largo tiempo, por delitos tales como asesinato, pillaje (robo a mano armada), violación, tráfico de drogas, quema de novias (forma tradicional de violencia intrafamiliar en algunos países asiáticos) y otros delitos atroces. También participaron diez prisioneros que estaban siendo juzgados por delitos similares y veintitrés miembros del personal. En el segundo curso hubo un total de trescientos treinta y cuatro participantes, la mayoría bajo juicio. Al tercer curso asistieron 1.004 reclusos varones, y 49 mujeres en otro lugar.
Entrenamiento previo al curso
Antes de la organización de estos cursos, once miembros del personal fueron enviados para participar en cursos de diez días en Centros de Vipassana tanto de Jaipur como Delhi, para familiarizarse con la técnica y adquirir experiencia sobre cómo se organizan los cursos.
Mi propia experiencia
Yo mismo tuve el privilegio de unirme a un curso en Jaipur después del primer curso en la cárcel. El curso me pareció muy útil. Siento que Vipassana es una técnica muy efectiva que puede traer una gran transformación en los patrones de comportamiento de los prisioneros, y que será útil en nuestros esfuerzos para reformar criminales. La técnica es científica y no sectaria y puede ser practicada por todos, independientemente de su casta, color, sexo, religión y nacionalidad.
Un estudio
Para determinar el impacto de la Meditación Vipassana, se entrevistó extensamente a cincuenta condenados e imputados que participaron en el curso de noviembre de 1993, tres semanas después del curso. Se realizaron entrevistas adicionales a otros convictos que residían en las mismas celdas que los participantes del curso para verificar la precisión de sus declaraciones.
Los siguientes son los principales resultados:
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La mayoría de los prisioneros declararon que tenían un mejor control de su ira. El resto dijo que, aunque la intensidad de la ira era la misma, ocurría con menos frecuencia.
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La mayoría de los prisioneros sintieron que habían obtenido algo de paz mental. Sufren menos estrés debido a razones menores y también debido a razones fuera de su control.
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Todos los prisioneros dijeron que habían mejorado en benevolencia y compasión hacia los demás, tanto los reclusos como el personal.
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Muchos sintieron que estaban menos centrados en sí mismos y que podrían considerar mejor la conveniencia y el punto de vista de los demás. Querían extender la ayuda y la cooperación a los compañeros condenados.
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Muchos prisioneros dejaron de fumar y otros redujeron drásticamente su consumo.
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La mayoría de los prisioneros informaron una mejoría en su salud. Hubo cierto alivio en problemas menores como dolor de cabeza y dolor de estómago.
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Muchos afirmaron que se habían vuelto más honestos, ya que decir la verdad les dio satisfacción.
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Muchos sintieron que estaban menos molestos por los acontecimientos desagradables del pasado y estaban más preocupados por el presente. Muchos sintieron que podrían planear un futuro más brillante.
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Todos pensaron que tales cursos deberían continuar siendo organizados en la cárcel. Todos afirmaron que habían comenzado a mejorar en sus actividades diarias.
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La mayoría pensó que habían mejorado en autodisciplina.
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Todos habían informado a sus familias sobre el curso y sus efectos beneficiosos.
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Muchos dijeron que les gustaría asistir a un curso en un centro de Vipassana con sus familias después de salir de la cárcel.
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Muchos expresaron su deseo de servir como trabajadores del Dhamma, si se les da la oportunidad.
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14. La mayoría de los prisioneros continuaban con su meditación al momento de las entrevistas, aunque algunos sólo de manera intermitente.
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Impacto en los miembros del personal
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El sentido del deber y la devoción aumentaron.
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Cambios positivos en los patrones de comportamiento.
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Las relaciones con los convictos mejoraron enormemente. Sintieron más compasión y menos odio hacia ellos.
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Muchos otros miembros del personal expresaron su disposición a asistir a un curso.